domingo, 31 de diciembre de 2017

Mi viejo y el mar



La inesperada partida de Patricio inundó de tristeza el pasado invierno a quienes fuimos su familia, sus amigos, sus camaradas del Partido Comunista, sus compañeras y compañeros de otras organizaciones hermanas aquí en el país y alrededor del mundo. Fue despedido con honor por los gobiernos de Cuba, Nicaragua, El Salvador, Venezuela, Bolivia, Vietnam. Se le recordó con la más honda estima en mensajes enviados desde Colombia, Uruguay, Paraguay, Brasil, Chile, la República Dominicana, Rusia, los Estados Unidos, México. Esparcida en estos y otros maravillosos lugares sobrevive una huella de sus pasos, dados con plena firmeza al compás de las luchas de nuestro tiempo

Su trayectoria es la de alguien que asume el momento histórico crucial que le toca enfrentar, o sea: sostener con dolor el cadáver de la difunta Unión Soviética que tantas generaciones de militantes habían ayudado a defender pagando el altísimo precio de la proscripción, la discriminación, el desempleo, la persecución, la cárcel  y el asesinato. De sostener la legitimidad de nuestra ideología y nuestra organización ante el arrollo criminal y colosal de un imperio capitalista exultante. Y como si esto fuera poco, de asumir además el deber de liderar un arduo, público y ejemplar proceso de autocrítica partidaria que ninguna otra fuerza del campo popular ha tenido hasta ahora el coraje de abordar

Su laboriosa proyección al plano internacional le valió el respeto y la amistad de los hermanos Fidel y Raúl Castro, de Daniel Ortega y el Frente Sandinista, de Schafik, Leonel, Ramiro y todo el Farabundo Martí, de Manuel Marulanda y las FARC. Nomás por mencionar algunos “monstruos”

Entiendo que su reconocida capacidad diplomática se basaba en el hecho fundamental de ser un hombre profundamente arraigado a su patria. Y como tal, un memorioso recitador del Martín Fierro, una fuente de referencia permanente e inagotable del refranero autóctono, un declarado admirador del santafesino Carlos Monzón y del cordobés Mario Alberto Kempes, un gozoso veraneante de las costas del Plata

Lo más difícil de la despedida fue para mí desandar las cuadras y avenidas que hay entre mi casa y Constitución, las veredas, las casas, los árboles y los cielos de la tarde que hice y deshice yendo y viniendo del Hospital de Clínicas, donde un miércoles por la noche falleció y por donde me he juramentado no volver a transitar nunca jamás

Pero ya pasó. La muerte pasó, y pasó el invierno. Después vino y se fue también la primavera. Ahorita es verano. Un mal año finalmente termina. Es entonces mi momento de intentar escribir esto y de retratarlo allá en cierto instante muy claro de su juventud, parado en el medio de la vida

Es enero de 1983 y Patricio Eduardo Echegaray Sánchez Balaguer Bordenave tiene 36 años


*

Mis padres nacieron en la provincia de San Juan y se criaron al pié de la pre cordillera de Los Andes, en un pueblito adorable llamado Jáchal, de esos con una plaza y una iglesia en el centro y donde todo el mundo se conoce. Su primera vacación junto al mar les tocó recién de grandes, ya casados y con dos hijos, cuando el Partido –que había organizado su traslado a la Capital Federal para que Patricio asumiera la tarea de relaciones políticas de la Fede– les asignó una quincena de recreo en San Clemente del Tuyú, en una casita más que humilde ubicada a no menos de veinte cuadras de la playa

Aunque desconocía lo que era zambullirse en aguas abiertas, mi viejo era un buen nadador, un aficionado de la natación entre otras varias disciplinas abarcadas en su pasión por el deporte, aún más fervorosa que la revolucionaria, o como solía explicar: complementaria. Lo primero fue pisar y sentir en los pies las arenas calientes del Tuyú, cruzar sus formidables médanos, ver el mar. Lo segundo, entablar amistad con el bañero, de quien recibió las orientaciones básicas indispensables para sortear sin peligro la rompiente y pilotear a la vuelta el poderoso tirón de las corrientes, eventualmente traicionero para el ignorante irrespetuoso de sus más elementales secretos: “Si ves que te cuesta salir no pierdas la calma. A la larga el mar siempre te saca”

Le gustaba meterse bien adentro, donde la serenidad del mar permite ejercitar diversos estilos sin tener que batallar contra el oleaje. Mientras tanto mi madre, mi hermanito y yo lo seguíamos desde la costa hasta que le perdíamos el rastro, y a menudo caía la noche cuando, ya algo asustados, hurgando en el horizonte en pos de su silueta, de pronto el tipo aparecía regresando despacito por el borde de la playa, con sus patas de rana colgando de las manos, con ese cansancio placentero que produce la nadada, con el feliz apetito del asado, los mariscos, la pizza o lo que estuviera previsto en el menú playero de la jornada

Yo tendría unos diez años cuando me llevó por primera vez con él en una de sus excursiones oceánicas. A la ida respondí bastante bien, pero a medida que ingresamos en alta mar mis fuerzas se fueron consumiendo hasta quedar en cero. Entonces él tomó aire, se extendió con la cabeza sumergida bajo el agua y quedó flotando como un considerable cetáceo peludo de cien kilogramos de peso, conmigo subido a la cubierta de su lomo, donde logré recuperarme y contemplar extasiado la inmensidad única del paisaje y la belleza de nuestra aventura

Así salimos juntos muchas veces, yo ayudado por su paternal espalda hasta que logré arreglármelas solo, a tal punto que años arriba tuve la oportunidad de hacer y completar con enorme satisfacción el curso de guardavidas

Después de San Clemente nos fuimos corriendo hacia  playas más al sur y una tras otra se sucedieron inolvidables temporadas en La Lucila del Mar y San Bernardo, hasta que en el estío del '83 recalamos en Mar de Ajó. Aquella vez yo pasé las fiestas con mis abuelos del lejano oeste y llegué al mar unos días más tarde. En ese lapso es que ocurre esta anécdota increíble


Según supe sucedió un domingo en horas del mediodía. En dicha ocasión el bañista sanjuanino se animó a adentrarse más lejos que en cualquiera de sus chapuzones anteriores. Y emprendiendo el retorno estaba cuando de repente un manotazo golpeó contra un objeto indefinido que lo paralizó del julepe. Al abrir los ojos, con la vista irritada por las sales marinas se encontró ante sí con la alucinante presencia de un bebé de “tonina”, como se designa a la especie de delfines domiciliada en la ribera atlántica de Sudamérica

Al parecer el animalito se había desviado del curso de la manada, había extraviado a su madre y se encontraba a la deriva, exhausto, hambriento y probablemente malherido. Quizás atraído por la vibra y el calor mamífero de Patricio Echegaray se arrimó hasta él y lo adoptó como a un padre, y como un padre fue que mi viejo sostuvo a la criatura por debajo de sus axilas, cambiando de una a la otra para descansar las brazadas, y lentamente la fue sacando sana y salva de regreso hacia a la costa

Mi madre cuenta que ya empezaba a preocuparse como de costumbre cuando de repente se armó un revuelo en la playa y todo el mundo corría en dirección del agua hasta armarse una multitud eufórica de niños y grandes que no paraban de señalar y sacar fotos a algo que ella no alcanzaba a comprender, hasta que en el foco del tumulto halló a su marido de rodillas abrazado al pequeño delfín.  No menos de dos horas se mantuvo acunándolo dentro del agua y procurando mantenerlo a distancia de la muchedumbre toquetona, hasta ser ambos socorridos por un destacamento del acuario Mundo Marino especialmente enviado desde San Clemente 
 
 
 
*

Siento que aquel fantástico rescate pinta con nitidez el bravo encanto de su alma, mejor incluso que las múltiples travesías por el Amazonas en busca de Marulanda Vélez u otras muchas andanzas
Esta  semana mi madre pudo volver a la costa argentina y devolver su amor al mar, de manera que Patricio sea hoy infinitamente parte del todo, del ayer y del mañana, del hasta siempre y pronto
Buen viaje, querido
JBE
31 de Diciembre, 2017
Domingo

domingo, 28 de mayo de 2017

Partido Comunista de La Rioja



Quisiera llegar hasta ti

Llegar de ir, ir de irnos, cerca o lejos, adonde sea que sea el lugar de la tierra y el cielo que sostiene el curso de nuestros días, punto brillante en lo alto de la siesta y tobogán de la tarde en su menguante ascenso hacia la copa de la noche

Llegar donde tuya es la luna, tuyo el sol, la realidad y su ensueño

Imagina recostarte sobre la falda de la sierra, bebiendo de una bahía blanca. Que vives un romance en la cubierta de un barco que vaya y venga eternamente arriba y abajo del Paraná, que en lengua tupí significa “pariente del mar”, padre de mi ancho río marrón del plata

Piensa que después de todo y ya pasado todo, vuelves como años antes a tu amada estación de Quilmes, o a “Darío y Maxi”, también llamada “Avellaneda”

Despertar en Jáchal, en San Juan, en Calingasta, en Santa Lucía, Villa Mercedes, La Pampa. Despertar como volver a la infancia, evitando los peligros de aquella vez y haciéndola de nuevo, pero mejor

Así quisiera poder llegar contigo a La Rioja, y presentarte allí a las compañeras y compañeros del Partido Comunista, del que has oído y visto tanto que ya nadie puede engañarte al respecto. Eres una persona honesta, como mis camaradas, entre quienes la inminente elección provincial, programada para el próximo domingo 4 de junio, ha suscitado en esta ocasión un entusiasmo inédito. Pues cansado de maltratos el pueblo riojano tiene en sus manos la oportunidad de votar por gente digna de su confianza y de su esperanza, tiene la chance de elegir nuestra lista
 
 
Yo te transmito en su nombre la bienvenida a tomar parte activa en esta última semana de campaña. Sólo tu corazón alcanza. Pero me refiero ni más ni menos que a tu propio nombre, al de tu pueblo, tu ciudad y tu barrio. A tus textos, comentarios, fotos, imágenes, afiches. A tus señales de aliento y a todas las canciones que te gustan, como un libro una palabra una guerrilla
 
Son momentos difíciles en todas partes. Sin duda. ¿Pero acaso este contraataque feroz no es también una reacción a nuestro avance?

Vente conmigo a La Rioja estos días, que luego seguiremos juntos, yendo por todas partes. Este es nuestro país, nuestra región, nuestro mundo. Este nuestro tiempo y nuestra revolución, hija del dolor, madre de nuestra dicha
 
Llegaremos

JBE
Barracas, Buenos Aires


 

jueves, 18 de mayo de 2017

Partido Comunista de Seattle, Washington

 
 
Los años noventa fueron duros para todo el mundo. La disolución de la URSS –negociada por una mafia política cualquiera en contra de la voluntad popular mayoritaria– libró al planeta a la suerte de arreglárselas solito contra el poder militar, económico y propagandístico de los USA. Para Cuba significó el “período especial”. Para Argentina el menemismo y la amnistía de los genocidas, el remate del patrimonio público, el colapso de la industria nacional, la masificación letal del desempleo y la miseria. Pero eso mismo fue lo que sucedió en la nueva Rusia. Y exactamente lo mismo pasó en los propios Estados Unidos. Así transcurrió nuestra vida en común durante aquella década terrible
 
Porque el problema está en el capitalismo, algo que casi todo el mundo a esta altura, veinte o treinta años más tarde, se da perfectamente cuenta. Aunque no veamos muy claramente cómo sería o no sepamos muy bien qué hacer, cómo será el gran cambio que corresponde. La buena filosofía del sentido común se conjuga con el saber de las ciencias sociales, exactas y biológicas en una dirección que si no es más nítida, se debe a la ofensiva criminal lanzada por el imperio contra las ideas del socialismo y el comunismo, horrorosamente materializada por doquier mediante el exterminio de quienes las enseñaron, militaron y transformaron en organización y solidaridad, en cuerpo y alma ofrendados al combate  
 
Mientras tanto, aquellos años también fueron de mucha y valiente lucha en todos lados. Lucha en sus distintos frentes. Vale repetir una vez más: los políticos, los gremiales, los estudiantiles, los barriales, los jurídicos, los frentes de comunicación social que con enorme esfuerzo montaron medios alternativos capaces de brindar una programación de contenido veraz, significativa, honesta y bella
 
Los noventas son también los años que parieron a Chávez, a Evo, a Lula, a Cristina. A la CTA
 
No menos importante fue entonces la tarea de los frentes artísticos, que en el caso de la música dio a luz nuevos movimientos estéticos como el surgido en el corazón de Norteamérica a partir de bandas como Nirvana, Pearl Jam, Soundgarden y tantas otras
 
Con dolor despedimos hoy –justo ahora en que nos hace tanta falta– a uno de los grandes jóvenes revolucionarios de este nuestro tiempo, como fue Chris Cornell
 
Pero sabemos perfectamente que sus canciones, su voz y sus guitarras nos seguirán acompañando por siempre. Seguirán siendo compañía y motivo de nuestra inspiración, nuestras alegrías, nuestros amores, nostalgias y tristezas
 
Seguirás luchando a nuestro lado siempre, ídolo. Siempre serás bienvenido a tocar en nuestra fiesta. Que sea pues hasta la victoria, hermano querido, como un grito

JBE
Barracas, Nublado

 
 
 
PS: En octubre del 2005, la banda Audioslave ofreció gratis y al aire libre en Cuba ante 70.000 personas el concierto más largo de su carrera como grupo, donde a diferencia de otros recitales anteriores incluyeron éxitos de Soundgarden y Rage Against the Machine. Chris Cornell invirtió un millón de dólares de su propia cuenta en la realización del evento, para el cual quedó listo e inaugurado el escenario de la “Tribuna Antimperialista José Martí”, ubicada en la Plaza de la Dignidad, frente al Malecón de La Habana. Audioslave fue la segunda banda estadounidense que tocó en Cuba desde el triunfo de la revolución. La anterior había sido Fabulous Titans en 1981. En noviembre del año pasado los Rolling Stones hicieron las delicias de un millón de cubanas y cubanos
 
 

domingo, 23 de abril de 2017

Nos siguen pegando abajo

Por JBE
 
A juzgar por la seguidilla de improperios recibidos últimamente de parte de personajes como Otto Vargas, Artemio López o Guillermo Moreno, cualquiera diría que el fantasma del comunismo recorre la Argentina y que una bíblica banda de cazadores ha salido en su persecución, más aún cuando constatamos que otro viejo exorcista como Norberto Galasso volvió a las andadas de persignarse en contra nuestra. La excusa para amonestarnos vino esta vez a colación de una entrevista sobre “qué significa hablar hoy de pensamiento nacional”, trillada cumbre cerebral que el historiador decidió atacar dejando al descubierto esa falla de nacimiento conque la genética del justicialismo –basada en el pacto social y la tercera posición: “ni yanquis ni marxistas”– carcome el hemisferio izquierdo de algunos peronistas incorregibles
 
De todas maneras no empieza nada mal el sermón, que reza más o menos así: “Formada por Clarín y La Nación, por la enseñanza tradicional de los colegios y por los intelectuales del sistema, la clase media argentina tiene un pensamiento antinacional formulado en función de los grandes intereses de las empresas extranjeras que explica la consagración de Macri en lo más alto del poder político”
 
Irrefutable descripción del carácter sumiso implantado desde el corazón del mundo capitalista en la mentalidad argentina promedio a través de sus gerentes locales. Pero acto seguido, y sin mediar ningún otro elemento de análisis, sobreviene abruptamente el zafarrancho:
 
 –Y la izquierda tiene algún rol en esto?
–Gran parte de la izquierda ha pensado en ruso. El PC, por ejemplo, ha pensado en chino, en vietnamita. No ha pensado en Latinoamérica
 
 
La importancia otorgada a la influencia del Partido sobre la idiosincrasia nacional es tan aparatosamente exagerada que la falsedad del planteo en sí mismo queda expuesta por obra y gracia de una evidente ridiculez
 
Pero lo absurdo no quita lo jodido. Hay que estar imbuido de un macartismo profundo y lindante con lo facho como para desempolvar las habladurías urdidas por el imperio desde 1917 para estigmatizar al comunismo como una “ideología foránea” y a su militancia como “agentes de la agresión marxista internacional”, campaña que a lo largo de décadas sirvió para sembrar el terror y la siniestra simpatía que la última dictadura cosechó entre vastos e imperdonables sectores de la opinión política y apolítica de nuestra sociedad programados para justificar el genocidio mirando para otro lado y repitiendo el lema “algo habrán hecho”   
  
Lo llamativo de la prédica anticomunista de Galasso no es sólo el hecho de que al ser consultado respecto de “la izquierda” se haya referido en exclusivo a nuestra organización, una elección que a pesar de su traza equivocada, chismosa y cizañera implica voluntaria o involuntariamente el reconocimiento de cierto y determinado lugar en la historia y la cultura. Lo curioso es que además no haga mención alguna a La Izquierda esa que –por desgracia– aparece hoy representada en la alianza de los partidos troskistas PTS y PO, afamada en los foros mediáticos por su rabiosa oposición a los gobiernos de Néstor y Cristina, por los infaltables piquetes de ruta montados al servicio sicario de la burocracia sindical encabezada por Moyano, Venegas y Barrionuevo, por su patriótica participación en las reuniones de apoyo al “campo” convocadas por la Sociedad Rural en Palermo, por un activismo golpista compartido codo a codo con Mauricio Macri, consagrado presidente gracias a ese medio punto que con absoluta coherencia el Frente de Izquierda al fin y al cabo le facilitó llamando a votar en blanco

Galasso y los cazafantasmas tienen una impecable puntería disparando al Partido Comunista. Los troskos siempre se les escapan, y tal cual como si se tratara de macrigatos les dan de comer, los acarician. ¿No será que Galasso y los cazafantasmas son troskos? 
 
Como fuere, no cabe duda de que conspiran contra la reunión efectiva de las fuerzas que juntas resisten al macrismo, luchando por volver al futuro inspiradas en el rescate de los grandes tiempos vividos entre el 2003 y el 2015, decididas a retomar su destino en dirección a la patria socialista que todo pueblo del mundo merece
 

domingo, 16 de abril de 2017

The Big Jesús



Mira los muchachos caminando
lo bien que se ven
trajeados de terciopelo verde
sus hebillas de plata brillando
pronto estarán roncando
bajo un barril de vino
abajo donde ruedan los borrachos

Mira al amante de pie
mirando fijo al suelo
buscando el amor verdadero
mentiras fue todo lo que encontró
podés  conseguir el verdadero amor
sólo te costará una libra
abajo donde ruedan los borrachos

Ahí va una mujer preocupada
ella sueña un sueño preocupante
ella vive en la ruta
mantiene su dinero limpio
pronto regresará
al lugar donde es la reina
abajo donde ruedan los borrachos

Podés ser un jugador
que nunca repartió una mano
podés ser un marinero
que nunca dejó tierra firme
podés ser nuestro señor Jesucristo
todo el mundo entenderá
abajo donde ruedan los borrachos

Richard y Linda Thompson
(1974)